† Soneto De Otoño †

Me dicen tus ojos, claros como el cristal:
"Para ti, extraño amante, ¿cuál es mi mérito?"
-¡Sé encantadora y calla! Mi corazón, al que todo le irrita,
a excepción del candor del antiguo animal,

no quiere mostrarte su secreto infernal,
arrulladora cuya mano me invita a largos sueños,
ni su negra leyenda escrita con llamas.
¡Odio la pasión y el ingenio me lastima!

¡ser maldito a quien, desde el profundo abismo
hasta lo más alto del cielo, nada, excepto yo, responde!
-¡Oh, tú, que como una sombra de rastro efímero,

pisas con pie ligero y mirada serena
a los estúpidos mortales que te han juzgado amarga,
estatua de ojos de azabache, gran ángel de broncínea frente!

0 comentarios:

Publicar un comentario